LA VIDA REAL (ACADÉMICA) SON NÚMEROS
Tiziano Tizona
Segundo día de no tener que ir al cole…cuál sería el nivel de estrés que parece que ha pasado un año. El cerebro (ese pequeño cabrón) va a su bola y no para de centrifugar en busca de los porqués de esos cursos tan jodidamente machacadocentes. Me viene a la cabeza los de las nuevas pruebas EVAU/PAU/EBAU (lo “selectividad” parece ser excluyente) y pienso si los resultados de las mismas los van a presentar con un informe comoetencial, con sus adaptaciones incluidas, o van a darle carpetazo con un número. Más: ídem con las notas de las facultades de Pedagogía y los máster unicorniales. Qué fácil es predicar y qué jodido dar trigo, brothers. Toda la caterva que rellenamos, horas y más horas, es resumida para la Administración en un cuatro, un seis o un nueve, es lo único que quieren y les vale. Amén de que hay chavales que no entran en tal cual carrera universitaria o grado de FP por una décima (o centésima). Ese es el mundo real que tanto predican y para el que preparamos a base de tiktoks, congas y pintar palomitas. Mientras tanto, a tener a los docentes entretenidos poniendo crucecitas no vayan a darse cuenta de que no hay recursos, ni respeto, ni consideración, ni climatización, ni libertad de cátedra, ni especialistas, ni sustitutos, ni defensa ante los equipos directivos…