¡CÓMO HEMOS CAMBIADO!
Tiziano Tizona
Sale en prensa (El Confidencial) que un 90% de los profes vive situaciones de violencia en los coles. Me resulta llamativo, a la vez que me congratula, el 10% restante. Porque, seamos realistas, a los niños de hoy (por lo menos a un porcentaje bastante elevado) no se les puede parar ni una mosca en el hombro sin que, por acto reflejo, suelten el jetazo. Ojo, que los de mi época nos íbamos a pelear con los del vecino a pedradas y a palazos. Pero hay unas diferencias bastante llamativas; por lo pronto lo hacíamos fuera del cole por lo que pudiera caer en forma de castigo, si llegabas aporreado allí te las componías (no haberte metido en peleas); si te castigaban en el cole por zumbarle a alguien, probablemente a ese castigo se le añadían varios lustros sin pisar la calle por parte de tus padres. Ahora no, ahora dejas sin jugar en el recreo a uno que ha tenido la gentileza de proporcionarle un chuletón a otro, y tienes que justificar delante de los progenitores (y a veces incluso de inspección) la causa por la cual ese ser angelical se ha visto obligado a soltar la galleta. Los culpables somos nosotros, aquella generación que acudía a casa llena de mataduras. No hemos encontrado la virtud del término medio, por lo menos en Educación, en ninguno de los casos. Estamos condenados, parece ser, al péndulo constante porque, visto lo visto, volverán las oscuras golondrinas.